El mito de la media naranja
El mito de la media naranja es de los mitos más antiguos. Cuando se menciona la media naranja es el indicador para referirnos al gran amor de nuestra vida. La media naranja es el sinónimo del amor platónico, es decir, una persona que encaja completamente en gustos, preferencias, ideologías y más con nosotros. Pero, ¿realmente existe la media naranja?
Esta expresión se relaciona con el amor ideal, ese mismo que parece de película y nunca termina porque vivirán felices por siempre. Sin embargo, el amor es algo diferente, es decir, no tan perfecto y lleno de luz como lo han vendido distintos medios.
El amor implica aceptar que no hay nadie perfecto para nosotros, sino que al contrario, la misma diferencia del uno y del otro permite la atracción. Es decir, el hecho que alguien sea diferente a lo que nosotros somos, genera deseo por compartir tiempo con tal persona.
El mito de la media naranja implica que cada persona no está completa consigo misma, así que es obligada o buscar sí o sí a alguien para llenar esa parte que cree faltante.
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Cada persona nace, se desarrolla y muerte sin la necesidad de otra persona. El mito de la media naranja alude a que una persona debe ser igual a otra para que cada media naranja formen la tan esperada naranja completa.
El mito de la media naranja es un concepto erróneo que impulsa a que las personas busquen incansablemente a alguien más que tenga bastantes características similares a nosotros. Pero, no debe porqué ser así.
Cada persona debe querer y aferrarse a otra persona cuando esta le ofrece paz mental y emocional. Recurrir a gustos semejantes no debería tener gran relevancia.
Si quieres concretar o atraer a una persona a tu vida, lo mejor que puedes hacer es recurrir a amarres Chicago donde encontrarás una guía que te oriente en tu caso.
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